Cada año ?desde hace varios años? el TC&C (Taller de corte & corrección) reúne a todos sus integrantes para compartir un asado y disfrutar de aquello que nos une: la buena literatura y las ganas de escribir. Fue así como, manteniendo la tradición, el 6 de julio nos encontramos nuevamente en el quincho del Tiro Federal.
Pero no fue sólo una noche de asado: algo la pintó de un color especial. Si hubiera estado dedicada a los poetas, habría sido una noche azul, aunque no se trató de versos esta vez. Debería entonces comenzar diciendo: ?Eran las nueve de una noche gris con luna creciente y niebla, cuando fuimos convocados ante el estandarte de ?La Abadía de Carfax?. Suena a misterio... pero no, no asistimos a una fiesta de vampiros sedientos, sino a la presentación de la antología Cuentos de la Abadía de Carfax. Historias contemporáneas de horror y fantasía. Trece escritores reunidos bajo una misma consigna plasmaron sus historias, prologadas y seleccionadas por Nomi Pendzik, en las impecables páginas de un libro editado por Pasoborgo, el nuevo sello de elaleph.com, que publica, entre otros, a Carlos Gardini y a Fernando Sorrentino.
Los presentadores Di Marco, Pendzik y Sorrentino
La presentación estuvo a cargo de Marcelo di Marco ?exultante gracias a la nueva edición de bolsillo de su exitoso Taller de Corte & Corrección ?, Nomi Pendzik y el mismo Sorrentino, quienes comentaron el libro, nos hablaron del origen de este grupo de escritores, y nos dejaron sus enseñanzas acerca un género que tanto ha dado a la literatura argentina: el fantástico (un verdadero lujo, porque ¿puede acaso haber alguien, en la actual literatura argentina, más indicado que Fernando Sorrentino para hablar de fantástico?). Todos los autores fueron presentados por Di Marco, fundador y líder de la Abadía, quien leyó párrafos aterradores, escalofriantes y siempre sabiamente elegidos, de cada uno de los cuentos.
El equipo de La Abadía: de pie, y de izquierda a derecha, están Forcinito, Sacerdote, Orta, Cattenazzi, Sardegna, Di Marco, Buccino, De Leo y Ruiz; y sentados, Tartavull, Alonso, Pendzik, Mazzeo y Rodríguez
Mientras tanto, afuera, el viento despejaba de nubes el cielo, a la vez que traía el humo irresistible del asador, así que, entre aplausos y gratitud, todos fuimos buscando una mesa para compartir asado, vino y una buena conversación. Cerca de la medianoche tocaron la campana y comenzó el habitual sorteo de libros... y cada quien se fue con su suerte. La mía fue justamente un ejemplar de estos Cuentos de la Abadía de Carfax.
La introducción y cada uno de los relatos hablan por sí mismos. Y, créanme, es un libro puro: puro de pesadillas, de espanto, de ese contenido fantástico que, en palabras de Nomi, es ?como una sinfonía, las muy diversas ?voces? o instrumentos, tonos y ?movimientos? que se ?oyen? en el libro: hay cuentos camarísticos y cuentos operísticos, con todo tipo de historias y personajes; hay monstruos ?con nombre y apellido? y otros innominados, hay horror psicológico y horror gótico; hay cuentos largos y otros breves; lentos y vertiginosos, poéticos y grotescos. Lo que sí tienen en común es que todos son excelentes, y para paladares fuertes.?
No puedo menos que estar de acuerdo con ella, y celebrar esta aparición. Tenebrosa, violenta y sombría, es literatura que pone en negro sobre blanco la existencia de la eterna batalla entre las luces y la oscuridad.