https://www.elaleph.com Vista previa del libro "El Tribuno de la multitud - Tomo I: Un héroe argentino" de Argentino Veraz (página 7) | elaleph.com | ebooks | ePub y PDF
elaleph.com
Contacto    Viernes 25 de abril de 2025
  Home   Biblioteca   Editorial      
¡Suscríbase gratis!
Página de elaleph.com en Facebook  Cuenta de elaleph.com en Twitter  
Secciones
Taller literario
Club de Lectores
Facsímiles
Fin
Editorial
Publicar un libro
Publicar un PDF
Servicios editoriales
Comunidad
Foros
Club de lectura
Encuentros
Afiliados
¿Cómo funciona?
Institucional
Nuestro nombre
Nuestra historia
Consejo asesor
Preguntas comunes
Publicidad
Contáctenos
Sitios Amigos
Caleidoscopio
Cine
Cronoscopio
 
Páginas 1  2  3  4  5  6  (7)  8  9  10  11 
 

1. La sangre derramada

Es 13 de diciembre de 1828 y hace un calor sofocante en el pueblo bonaerense de Navarro. Un hombre vestido con una chaqueta de tela escocesa, que tiene su cabeza levemente inclinada hacia uno de sus lados, producto de una herida ocasionada en un combate por la libertad de los argentinos, conversa con el cura Juan José Castañar. Ese hombre es el Coronel Manuel Dorrego, condenado a muerte por orden del General Lavalle.

Con convicción le explica a su confesor: "No hay remedio, mis enemigos van a sacrificarme: Estos ciegos ministros de Teutates, el bárbaro y cruel dios de la Guerra, piden a gritos mi sangre y ella correrá muy pronto, pero no siento tanto mi muerte como el descrédito y los males que amenazan a nuestra amada Patria. ¿Qué dirá el Emperador del Brasil, cuando sepa que ha sido fusilado como un criminal el Jefe Supremo de un Estado, con quien acaba de restablecer las mejores relaciones de amistad y de comercio, firmando una paz que tanto me honra, aunque me cuesta la vida? ¿Qué dirán los señores ministros extranjeros, que me han dispensado sus afectuosas consideraciones, cuando vean que Las Leyes del país no protegen a un Gobernador que por respetarlas va a ser sacrificado?Sé que la Ley es la que autoriza al magistrado y que ella es la protectora de los desvalidos cuando se los oprime, porque el mayor de los abusos es el del poder. Los pueblos esclavos no pueden tener virtudes y sin ellas ni hay Patria, ni puede haber República. Pues la Anarquía y la Arbitrariedad Despótica son hijas de un mismo padre: El Desprecio de la Ley. Cuando la desprecia el súbdito se llama Anarquía. Cuando la desprecia el superior: Despotismo, Arbitrariedad, Tiranía. Una y otra cosa tiene funestos resultados, empero son peores, más duraderos, de mayor trascendencia los que causa la Tiranía, porque es más poderosa, tiene más prosélitos y se cree más impune.Sé muy bien que atropelladas las Leyes con impunidad y trastornadas las formas legales por capricho, no hay Estado, no hay Libertad, no hay Patria; porque nada queda donde no hay Gobierno. ¡Ah! ¡Si yo pudiera morir sin que se resienta el crédito de la República y especialmente de este gran pueblo al que debo mi existencia! ¡Si yo supiera que el borrón con que mis asesinos van a manchar la Historia, habrá de caer solamente sobre su execrable conducta, al menos ese consuelo me haría descansar en el sepulcro!"

 
Páginas 1  2  3  4  5  6  (7)  8  9  10  11 
 
 
Consiga El Tribuno de la multitud - Tomo I: Un héroe argentino de Argentino Veraz en esta página.

 
 
Está viendo un extracto de la siguiente obra:
 
El Tribuno de la multitud - Tomo I: Un héroe argentino de Argentino Veraz   El Tribuno de la multitud - Tomo I: Un héroe argentino
de Argentino Veraz

ediciones deauno.com

Si quiere conseguirla, puede hacerlo en esta página.

 



 
(c) Copyright 1999-2025 - elaleph.com - Contenidos propiedad de elaleph.com